Después de una consulta, nuestro primer objetivo es conocernos in situ y completar un estudio completo de la ubicación. Además de conocer su demanda de energía y presupuesto, realmente estudiamos con detalle el sitio. Cada ubicación es diferente; no hay una solución única al diseñar un sistema solar. La topografía local, los edificios, la vegetación y el uso (tanto ahora como en el futuro) tienen gran influencia en el diseño y la disposición del sistema. Al reunirnos in situ antes de presupuestar los trabajos, nos aseguramos de que se consideren todos estos factores, y obtenemos un plan preciso y acordado desde el principio.
También se discute en esta etapa su grado de participación. Algunos clientes son prácticos y desean participar en el trabajo y obtener así una mejor comprensión de su sistema; otros prefieren no involucrarse en el proceso, sabiendo que nuestros expertos están cuidando de todos los detalles logísticos y de ingeniería.

Después del estudio de la ubicación, proporcionamos presupuestos y diseños detallados, informándole de los componentes clave del sistema y las posibilidades y limitaciones de cada opción. Combinamos nuestra experiencia de ingeniería con software profesional para calcular los diseños más adecuados y, para proyectos más involucrados, producir esquemas eléctricos.
La propuesta se basará en un cronograma acordado, que a menudo se ajuste a otras obras de construcción, o plazos para la puesta en marcha.
Una vez que hemos acordado una propuesta y un cronograma de trabajo, trabajamos con nuestros proveedores para reunir todo el equipo y mano de obra necesarios para completar la instalación en el plazo acordado. Puede ser, por ejemplo, que planeemos completar las obras de movimiento de tierras semanas antes de que se instalen los componentes eléctricos, para encajar con otras actividades in situ.

La puesta en marcha y la entrega siguen a la instalación, que consideramos una etapa muy importante en el proceso. Se completa un documento de puesta en marcha completo, que muestra la información clave, la configuración, el programa de mantenimiento, los detalles de registro y otra información importante.
Hemos visitado varios clientes que poseen sistemas que tal vez compraron por Internet, sin apoyo del proveedor y sin formación sobre su uso y mantenimiento. Un sistema solar puede ser una gran inversión, y potencialmente peligroso si se utiliza incorrectamente, por lo que siempre nos aseguramos de no dejarle hasta que se sienta seguro de cómo usar y mantener su sistema.
Con mejoras en la conectividad, incluso en sitios aislados, hemos equipado a muchos clientes con sistemas de monitoreo remoto como OpticsRE de Outback. Con este sistema, el cliente o el instalador pueden conectarse desde cualquier ubicación habilitada para Internet y comprobar el estado de su sistema y realizar los cambios necesarios.
Si no hay Internet disponible en el sitio, podemos proporcionar un router 4G con antena y SIM adecuados para obtener tanto el monitoreo solar remoto como el uso general de Internet en funcionamiento en el sitio.
Este nivel de monitoreo da una verdadera tranquilidad a nuestros clientes y nos ayuda a mantener todos los sistemas instalados funcionando sin problemas.